Tuesday, February 4, 2014

Momentos embarazosos / Embarrassing Moments

El hábito no hace al monje ni el mandil a la camarera. Y como decía mi abuela: "Què sap el gat de fer culleres si no ha estat mai cullerer?" No, no le puedes pedir a un gato que sepa hacer cucharas porque jamás se ha dedicado a tal menester. Tampoco podían pedirle a una servidora convertirse de la noche a la mañana en una eficiente y profesional camarera.No sé porqué entré a trabajar en aquel restaurante francés  tan refinado y que para más señas estaba en el interior de un conocido museo inglés.Bien, sí, por enchufismo.
Si Uri Geller podía doblar cucharas, yo era capaz de hacer volar tenedores
Confieso que yo jamás había trabajado en el mundo de la hostelería.Y claro, pasó lo que pasó. Era mi tercer día en el puesto.Querían entrenarme - ¡agarraos! - como sommelier (¡A mí!¡Que no me gustan ni entiendo de vinos!) pero al comprobar lo verde que estaba (¡No sabía ni abrir una botella!) decidieron ir enseñándome poco a poco y que me encargara de momento de las tareas más sencillas como repartir el pan y retirar platos.¡Cómo pesaban los dichosos platos! Quise hacerme la profesional y coger varios platos a la vez de una mesa en la que estaban charlando animadamente un grupo de señoras de mediana edad.¡Aquello era lo más parecido que he hecho a levantar pesas! ¡Ánimo Gen, que tu puedes! Pero al agarrar el último plato ocurrió la tragedia: un tenedor salió disparado y se metió dentro de la blusa de una de las comensales. Y ahí me tenéis, más roja o más bien más granate que mi uniforme, tratando de pescar con mis deditos el escurridizo cubierto de la espalda de la señora que continuaba conversando con sus amigas y que parecía no percatarse de que estaba protagonizando involuntariamente un gag cómico. Flema británica o compasión por la novata; el caso es  que rescaté el tenedor y nadie dijo nada ni hizo la menor mueca. Dudo mucho de que la señora no notara el frío metal del tenedor en la espalda ni de que ninguna de sus compañeras me viera hurgando en su cogote. Quien si debió observarme fue mi jefe - o los vigilantes del museo (¡menudos eran!) - porque a los dos días me pusieron de recepcionista. Allí al menos no podía tratar a los clientes como muñecos del juego "Operación".
Uri Geller could bend spoons but I was able to make forks fly.
The habit doesn´t make the monk and the apron doesn´t make the waitress, either.Some years ago I got a job as a waitress at a very posh French restaurant. I confess that  I didn´t have any experience and well, it had to happen...On my third day when I was clearing a table, a fork slipped inside a customer´s blouse and I had to retrieve it from her back as I could.I felt like being on a hidden camera show. It was very embarrassing but the lady seemed not to notice the cold metal touching her skin.I suppose she did but she said nothing for compassion towards me; a girl that was too scared of getting the sack. And you know, I kept my job, well, not exactly. Two days later they decided that I would make a good receptionist. They wanted to be sure that I wouldn´t treat a customer like a "Cavity Sam" anymore.

6 comments:

chema said...

no sé dónde leí que ese tipo de situaciones incómodas, pasado un tiempo puedes contarlas como si le hubieran pasado a otra persona. todos hemos tenido alguna así, yo el primero. :)
creo que lo mejor de todo es lo bien que se portó la señora a la que le había caído el tenedor que se te escapó, así como sus amigas. hicieron todo lo posible por no ponerte en evidencia.

Candela. said...

Jajajjajajaaa, no me lo puedo ni imaginar11 Parece un gag the Little Britain XDDD

Gen said...

Efectivamente tuve la suerte de encontrarme con gente maja y comprensible.No quiero ni imaginarme que hubiera pasado de lo contrario o de si la señora se hubiera hecho daño con el tenedor volador. Ni que lo digáis, parece un gag cómico del que ahora me río pero que en su día no me hizo ni puñetera gracia. Para que os hagáis una idea no se lo he contado nunca ni a mi madre ni a mi pareja XDD

Unknown said...

Hola: si me pasa me muero... qué corte!! tuviste muchísima suerte que la señora ni se inmutó... Me puedo imaginar la situación... por lo menos no te echaron y te cambiaron de puesto.. es la típica situación de trágame tierra y por qué a mí!!! seguimos en contacto

Kora said...

Me ha hecho recordar la película "El Guateque" de lo Peter Sellers, con el tenedor y el pollo y el camarero beodo!! Si no la has vito te la super recomiendo.

Gen said...

Marta, de verdad que lo único que hubiera querido en esos momentos es que se me tragara la tierra.
KorasVictory, No me suena haberla visto. En mi defensa diré que yo no estaba pedo aunque quizás si hubiera estado borracha serviría como atenuante XD

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